sábado, 19 de noviembre de 2016

"De sociabilizar y otras yerbas" por Rodrigo Durán


Desde niño la timidez me provocaba esconderme tras los postes de la luz; ante miradas que me sonreían o gente desconocida.
Con el tiempo uno razona. Enfría esa parte que tiene que ver con sentir sonrojo y se la mete al bolsillo.
Fruto de un padre que orgulloso lucía a uno de sus hijos para que cantara (obligado) ante unos expectantes invitados; canciones folclóricas que no entendía, ni menos, gustaba.
Ahora ya de adulto, comprendí que a los niños no se les obliga a nada; puedo mostrarles que hago (siendo ejemplo) y las técnicas que utilizo para lograr lo que me gusta; pero no obligarlos a que hagan, lo que a mí me gusta.
Recordaba que pase por varios colegios y mi única forma de flotar en la infancia y la adolescencia era haciendo buenas migas con los de mi edad; pero lamentablemente no podía hechar raíces en esas relaciones debido a que mis padres se cambiaban de casa constantemente...y seamos               sinceros...si eres niño queramoslo  o no...la distancia es un factor que impide que mantengas relaciones de amistad a lo lejos...de esta forma siempre tuve muchos "amigos" más que nada  conocidos; que me  compartían sus peripecias o yo ayudaba en ellas y juntos hacíamos parte de este montón de gente que viene a hacer de este sitio un lugar mejor de este  planeta. La niñez fue una cachetada de payaso...no sabia si reír o llorar...la adolescencia fue un golpe en la guata y la adultez ; sería como estar en el ring del " club de la pelea" sólo que en este ring, tengo que luchar por dejar los fantasmas de la timidez y del sonrojo por hablar en público; exigir lo justo; y avanzar.
Nunca pensé (hasta ahora de adulto) que tanto puede afectarte  siendo niño; el ser del montón o preferir estar al término de una fila para que no te consideren...entendí entonces que para conseguir objetivos, metas y logros; tendría que "sacar el habla" como decían los abuelitos...haciendo de esta tarea repetitiva mi forma de expresarme. También comprendí que en la medida que sociabilizaba; creaba redes, me fortalecia y no tenia ya que sentirme mal o culpable por acudir a otros en busca de lo que sintiera una necesidad...conforme pasaron los años decidí un día, que seria valiente y no tendría más temor de pararme frente a la gente y decir Lo que pienso...algunas experiencias como tener que exponer ante mucha gente; también ante gente más joven que yo (y ahí me sentía más seguro porque hablaba desde mi experiencia y seguridad); avanzando en el tiempo; me di cuenta de que el sociabilizar me acercaba a la gente y eso me regalaba la opción de aprender de aquellos que ya habían vivido más que yo o que tenían algún conocimiento interesante para practicar o aplicar a mi vida.
Tener amigos y conocidos me dio la posibilidad de seguir creciendo como persona; aunque muchos no lo quieran admitir; somos seres etareos  y necesitamos los unos unos de los otros. Vivimos en un momento clave; sólo falta tu voluntad para acercarte a otros y aprender. RD

No hay comentarios:

Publicar un comentario